En esta montaña de rusa de sentimientos que estoy viviendo, me decidí, una vez más, de manera impulsiva, a emprender un viaje para aprender. Me voy a México D.F. con mi amiga Lina y su amigo el "Pequeño", ambos se dirigen a la Feria del Libro de Guadalajara. Yo me dirijo, para variar, hacia donde me lleve la corriente, pero siempre esperando aprender de lo vivido y de la oportunidades que gracias a Dios, nunca me faltan.
Acabo de comprar una maleta mediana, en la que espero quepan todos mis fantasmas, para dejarlos en algún lugar, dónde no los pueda encontrar, así regrese a buscarlos. Sería un negocio boyante. Tener una bodega donde puedas dejar todos los errores y sentimientos de los que te quieres deshacer. Sin lugar a dudas tendría una cuponera de cliente frecuente.
Este viaje está lleno de esperanza. Esperanza de encontrar que camino por la vía que me traerá la felicidad; la de la escritura, la creatividad, la vida sin estrés y sin limitaciones. Y me llevan dos personas que saben mucho de eso. Esperanza. Lo último que se debe perder es la esperanza. En clases escuché que si en un cuento, se mata a un niño, ese cuento no tiene esperanza. No voy a ser yo la que mate al niño.
Y a propósito de México, yo crecí escuchando a este personaje, que puede parecer tonto, pero a veces tiene mucha razón. Como él, voy al País de la Fantasía, donde puedo ser, lo que quiero ser y no habrá nadie que me diga lo contrario.
2 comentarios:
Hey, bienvenida al mundo blogero.
Gracias Pancho! Es algo nuevo para mí. Me inscribí en un taller de redacción y me desvié hacía la escritura de cuentos http://ilvolodelciuco.blogspot.com, pero retomé la idea inicial... eres bienvenido en mi blog y de paso extrañado en el mundo real!
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